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Claus y Lucas.

Agota Kristof.

14° de mis #librosen2023. «Claus y Lucas», escrito entre 1986 y 1991 por Agota Kristof y publicado por Libros del Asteroide en esta edición de 2019.
4.185 #páginasleídasen2023.

Cómo es el mundo de la literatura… Hasta hace poco no sabía quién era Agota Kristof, y ahora termino de leer esta barbaridad y me entero de que, con muy poquitas novelas publicadas, estuvo durante un tiempo en las quinielas del Nobel. Al final falleció en 2011 sin ganarlo, pero eso es irrelevante porque la huella de una escritora no está en los premios que recibe sino en las obras que publica.
«Claus y Lucas» es, junto a «La guerra del fin del mundo», de Mario Vargas Llosa, el libro más duro que he leído. Me ha hecho presenciar algunos de los actos más oscuros que el ser humano puede cometer, y ha sido, aunque no se llegue a decir, en el peor contexto, claro: la Segunda Guerra Mundial. Pero lo extraordinario que atesoran estas páginas tiene que ver con la capacidad de Kristof para involucrar al lector desde los más diversos lugares. Lo hace con el cambio de narrador, con una historia que dura cincuenta años en la que se entra y se sale de la psique humana con soltura, y, sobre todo, con ellos, Claus y Lucas, unos niños que, empujados a sobrevivir, desarrollan unas estrategias tan alejadas de la humanidad como necesarias y útiles. Y todo ello ocurre en tres libros recopilados ahora en uno, que separados parecen diferentes, pero juntos son un todo que deja una maravillosa responsabilidad en el lector porque, al ser invitado a adivinar lo que está pasando y lo que no, quiénes son Claus y Lucas, si realmente existen, si la historia, tal y como es contada, está ocurriendo o no, convierten el camino en una búsqueda de la verdad consciente y atenta. Probadlo, leedlo. Os aseguro que es un regalo albergar teorías propias llenas de aristas y recodos, incompletas pero posibles. Dejad que Agota Kristof lance el dado y os empuje a decidir cómo encajar la información para construir la historia, vuestra historia, sí, pero, sin duda, la de ella. Porque esto, amigos, es literatura del más alto nivel, y formar parte de ello es, ya os digo, un regalo.