Natsume Sōseki.

10° de mis #librosen2020: «Kokoro», escrito en 1914 por Natsume Sōseki y publicado por la editorial Impedimenta en esta edición de 2014.
Traducción de Yoko Ogihara y Fernando Cordobés.
3.080 #páginasleídasen2020.
Me he propuesto volver a Sōseki cada poco tiempo, porque nadie como él es capaz de abstraerme de la realidad y vivir, de verdad, otras vidas, las de sus personajes y otra época, el final de la era Meiji en Japón.
«Kokoro» es un concepto difícil de traducir por lo que los no nativos en lengua nipona nos tenemos que resignar a entenderlo a medias: Corazón, espíritu, pensamiento… No es sencillo. Esta novela destila un poco de cada uno de esos términos mientras cuenta la relación de un joven estudiante y un sensei. En torno a toda la narración sobrevuelan conceptos como la vida y la muerte, los padres, la amistad o el amor, y todo muy desde el costumbrismo sōsekiano, que es el costumbrismo japonés de principios del siglo XX. La estructura es muy interesante; son tres partes: Sensei y yo, mis padres y yo y testamento de Sensei, con lo que desde el principio el lector ya maneja la información del contenido de la historia, si bien el autor le mantiene en ascuas —como debe ser— sobre los porqués del mismo.
«Ahora sí, ahora voy a abrirte mi corazón para verter mi sangre sobre ti» le dice Sensei al protagonista en el inicio de su carta y no se me ocurre mejor forma de integrar todos los significados de Kokoro: el libro, el concepto, la mente de Sōseki.
De Sōseki también he reseñado «Más allá del equinoccio de primavera»